DETECTIVES PRIADOS GRUPO ARGA
Los detectives son profesionales que se dedican a obtener y aportar información y pruebas sobre conductas o hechos de interés para sus clientes. Los hay de dos tipos: los detectives privados y los detectives de policía. Ambos comparten el objetivo de resolver casos, pero tienen diferencias en sus ámbitos de actuación, sus requisitos, sus herramientas y sus limitaciones legales.

¿QUÉ INVESTIGAN LOS DETECTIVES?
Los detectives privados son aquellos que trabajan por cuenta propia o para agencias de investigación, y que ofrecen sus servicios a personas físicas o jurídicas que los contratan. Según la ley de seguridad privada en España, los detectives privados pueden investigar los siguientes ámbitos:
– Conductas o hechos privados relacionados con la vida familiar, social o personal de una persona, excepto los que se desarrollen en domicilios o lugares reservados.
– Incumplimientos laborales, mercantiles, económicos o financieros.
Algunos ejemplos de casos que puede investigar un detective privado son: infidelidades conyugales, bajas laborales fraudulentas, competencia desleal, morosidad, localización de personas o bienes, custodia de menores, consumo de drogas, etc.
Para ser detective privado en España se requiere tener la titulación universitaria de investigación privada o un título equivalente homologado por el Ministerio del Interior. Además, se debe obtener la habilitación profesional expedida por la Dirección General de la Policía y la Guardia Civil. Los detectives privados deben cumplir con una serie de normas éticas y deontológicas, así como respetar los derechos fundamentales de las personas investigadas.
Los detectives privados utilizan diversas herramientas y técnicas para realizar sus investigaciones, como: cámaras fotográficas o de vídeo, grabadoras de sonido, dispositivos GPS, bases de datos públicas o privadas, fuentes humanas, seguimientos, vigilancias, infiltraciones, etc. Los detectives privados pueden grabar imágenes o sonidos siempre que se refieran a hechos que tengan lugar en espacios públicos o abiertos al público, y que sean relevantes para el caso. Las grabaciones realizadas por un detective privado son legales y pueden ser admitidas como prueba en un juicio.
Los detectives privados no pueden hacer todo lo que quieran en sus investigaciones. Hay ciertas cosas que les están prohibidas por la ley o por la ética profesional. Algunas de ellas son:
- Investigar delitos públicos o intervenir en ellos sin comunicarlo a las autoridades competentes.
- Usar medios ilícitos o violentos para obtener información o pruebas.
- Revelar datos personales o confidenciales de las personas investigadas sin su consentimiento o sin autorización judicial.
- Suplantar la identidad o la función de un agente de la autoridad o de otro profesional.
- Entrar en domicilios o lugares reservados sin permiso o sin orden judicial.
- Portar armas u objetos peligrosos sin licencia o sin necesidad.
- Coaccionar, amenazar o extorsionar a las personas investigadas o a terceros.
- Colaborar con otros profesionales que no estén habilitados para ejercer la investigación privada.
- Actuar en contra de los intereses de su cliente o aceptar encargos contrarios a la ley o al orden público.
Los detectives de policía son aquellos que forman parte de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, y que se encargan de investigar delitos públicos con el fin de reunir pruebas contra los presuntos autores y ponerlos a disposición judicial. Los detectives de policía pueden ser nacionales, autonómicos o locales.
¿QUÉ HERRAMIENTAS Y TÉCNICAS UTILIZA UN DETECTIVE PRIVADO EN SUS

¿QUÉ INVESTIGAN LOS DETECTIVES?
INVESTIGACIONES?
Los detectives privados son profesionales que se dedican a obtener y aportar información y pruebas sobre conductas o hechos de interés para sus clientes, ya sean personas físicas o jurídicas. Para realizar su trabajo, los detectives privados utilizan diversas herramientas y técnicas que les permiten recabar datos, seguir pistas, vigilar objetivos y documentar evidencias. Algunas de estas herramientas y técnicas son las siguientes:
– Cámaras: las cámaras son imprescindibles para captar imágenes o vídeos de las personas o situaciones que se investigan. Los detectives privados suelen usar cámaras de alta resolución, con diferentes objetivos, como el teleobjetivo, que permite hacer fotos a larga distancia. También pueden usar cámaras ocultas o camufladas en objetos cotidianos, como bolígrafos, relojes o gafas.
– Micrófonos y grabadoras de sonido: estos dispositivos permiten registrar conversaciones o sonidos que puedan ser relevantes para el caso. Los detectives privados pueden usar micrófonos de alta sensibilidad o de contacto, que se colocan cerca de la fuente de sonido o en superficies que lo transmiten. También pueden usar grabadoras digitales o dispositivos móviles para almacenar y reproducir los audios.
– GPS: el sistema de posicionamiento global permite localizar y seguir el movimiento de una persona o un vehículo mediante señales satelitales. Los detectives privados pueden usar dispositivos GPS con imanes que se adhieren a los bajos del coche del objetivo, o aplicaciones móviles que envían la ubicación en tiempo real. El GPS facilita el seguimiento discreto y evita perder el rastro del investigado.
– Bases de datos: las bases de datos son fuentes de información que contienen datos personales, financieros, laborales, judiciales o administrativos de las personas o entidades que se investigan. Los detectives privados pueden acceder a bases de datos públicas o privadas, siempre que respeten la normativa de protección de datos y la confidencialidad de la información. Algunas bases de datos que pueden consultar son el Registro Civil, el Registro Mercantil, el Registro de la Propiedad, el Padrón Municipal o el Fichero de Morosos.
– Fuentes humanas: las fuentes humanas son personas que pueden aportar información útil para la investigación, ya sea por conocimiento directo o indirecto de los hechos. Los detectives privados pueden contactar con fuentes humanas como testigos, familiares, amigos, vecinos, compañeros o empleados del objetivo, y obtener su colaboración voluntaria o mediante incentivos. Los detectives privados deben tratar a las fuentes humanas con respeto y profesionalidad, y verificar la veracidad y relevancia de la información que proporcionan.
– Seguimientos: los seguimientos consisten en observar y seguir los movimientos y actividades de una persona sin ser detectado. Los detectives privados realizan seguimientos para comprobar el comportamiento, las relaciones, los hábitos o las rutinas del objetivo. Los seguimientos pueden ser a pie o en vehículo, y requieren de habilidad, discreción y adaptación al entorno. Los detectives privados deben evitar llamar la atención del objetivo o de terceros, y respetar su intimidad y su derecho a la imagen.
– Vigilancias: las vigilancias consisten en observar desde un punto fijo un lugar donde se espera que ocurra algo relacionado con la investigación. Los detectives privados realizan vigilancias para controlar la entrada o salida de personas o vehículos, el intercambio de objetos o documentos, o la realización de actividades ilícitas o sospechosas. Las vigilancias pueden ser estáticas o dinámicas, y requieren de paciencia, concentración y resistencia.

¿QUÉ INVESTIGAN LOS DETECTIVES?
¿QUÉ BENEFICIOS PUEDE APORTAR UN DETECTIVE PRIVADO A SUS CLIENTES?
Los detectives privados son profesionales que se dedican a obtener y aportar información y pruebas sobre conductas o hechos de interés para sus clientes, ya sean personas físicas o jurídicas. Los detectives privados pueden ofrecer diversos beneficios a sus clientes, según el tipo de caso que se les encargue. Algunos de estos beneficios son los siguientes:
– Veracidad: los detectives privados garantizan la veracidad de la información y las pruebas que obtienen, ya que las contrastan y verifican con diferentes fuentes y métodos. Los detectives privados actúan con ética y profesionalidad, y no manipulan ni falsean los datos que recaban. Además, los detectives privados pueden ratificar sus informes ante los tribunales de justicia, lo que les otorga validez legal.
– Confidencialidad: los detectives privados respetan la confidencialidad de la información y las pruebas que manejan, y solo las revelan al cliente que les ha contratado o a la autoridad competente si así se les requiere. Los detectives privados cumplen con la normativa de protección de datos y de seguridad privada, y no divulgan ni ceden los datos personales o sensibles de las personas investigadas o de sus clientes.
– Eficacia: los detectives privados cuentan con la formación, la experiencia y las herramientas necesarias para realizar su trabajo con eficacia. Los detectives privados se adaptan a las necesidades y objetivos de cada cliente, y diseñan un plan de investigación adecuado a cada caso. Los detectives privados utilizan diversas técnicas y recursos para recabar datos, seguir pistas, vigilar objetivos y documentar evidencias.
– Ahorro: los detectives privados pueden suponer un ahorro para sus clientes, tanto en tiempo como en dinero. Los detectives privados realizan su trabajo en el menor tiempo posible, evitando demoras o dilaciones innecesarias. Los detectives privados también pueden evitar pérdidas económicas o daños patrimoniales a sus clientes, al detectar y prevenir fraudes, impagos, robos o infracciones.
– Solución: los detectives privados pueden aportar una solución a los problemas o conflictos que afectan a sus clientes, al proporcionarles información y pruebas que les permitan tomar decisiones o emprender acciones. Los detectives privados pueden ayudar a sus clientes a resolver situaciones como infidelidades, bajas laborales fraudulentas, competencia desleal, morosidad, localización de personas o bienes, custodia de menores, consumo de drogas, etc.
En conclusión, contratar a un detective privado puede reportar múltiples beneficios a sus clientes, tanto en el ámbito personal como en el profesional. Un detective privado puede ofrecer veracidad, confidencialidad, eficacia, ahorro y solución a sus clientes, siempre que actúe dentro de la legalidad y la ética profesional.